El consumo de combustibles fósiles ha originado un importante impacto ambiental a nivel global. La emisión de gases de efecto invernadero (GEI) es uno de los principales motivos del cambio climático. Por ello, en las últimas décadas se ha dado un mayor impulso a las energías limpias, o procedentes de fuentes renovables, caracterizadas principalmente por su menor emisión de GEI y el aumento directo en el ahorro económico.
El turismo por su, cada vez, mayor importancia en la economía majorera representa un sector con grandes posibilidades para implementar este tipo de tecnologías limpias. También para tomar medidas destinadas a un mayor ahorro y que lleven a una mejor eficiencia energética.
Hay un tipo de turismo que está estrechamente relacionado con el gasto y la crisis energética que estamos viviendo en los últimos tiempos, nos referimos al llamado “Turismo energético”.
Podríamos decir que el turista energético es aquel que sale de su país no con la motivación principal de descubrir nuevos lugares, culturas y paisajes, sino, más bien, para escapar de las bajas temperaturas que sufren en la época invernal y de los elevados precios del gas y la electricidad que tienen en sus países de origen. Esto último afecta gravemente a los bolsillos de los ciudadanos de la Europa Central y del Norte, principalmente.
Diferentes estudios y encuestas realizadas por YouGov para el Deutsche Presse Agentur apuntan a que un alto porcentaje de alemanes tienen la intención de viajar a destinos cálidos durante la temporada de invierno 2022 – 2023. El motivo fundamental hay que buscarlo en los altos costes de la energía en Alemania y la elevada inflación, que se sitúa en un 10 %, 3 puntos por encima de España. El estudio también destaca la posición de Canarias como destino favorito para el invierno.
Por ello nuestro archipiélago, y en particular Fuerteventura, se está postulando como un gran receptor y destino refugio de turistas que buscan temperaturas más suaves y que, además, pretenden reducir su gasto energético.
En el contexto de crisis energética, un ciudadano centroeuropeo, en su país, gastaría más del doble de dinero durante este invierno que viviendo en Fuerteventura.
El fenómeno de las estancias de larga duración en invierno no es nada nuevo en Canarias. Sin embargo, la actual crisis energética ha proporcionado un plus inesperado, que ha motivado el incremento exponencial de reservas por parte de jubilados y nómadas digitales, durante los meses más fríos.
La nueva modalidad de turismo energético ha venido para quedarse y nos tendremos que acostumbrar a ella.
¿De cuánto tiempo es la estancia media de un turista energético?
El turista que llega a Fuerteventura, huyendo de las bajas temperaturas de su país, suele tener un poder adquisitivo medio alto. Su estancia media es de unos 30 días. Alcanza, en muchas ocasiones, los 3 – 4 meses, cifras a todas luces muy superiores a las del turista vacacional tradicional, ya sea de épocas invernales o estivales, que no pasa de los 15 días de estancia en el mismo alojamiento.
¿Qué espera encontrar el turista energético y que ofrece Fuerteventura?
1 – Lo primero que busca esta modalidad de turista es, por supuesto, un clima agradable. Así que, Fuerteventura está en una posición privilegiada a la hora de ser elegida como un destino turístico energético excelente.
Recordemos que, Fuerteventura se caracteriza por su clima con pocas variaciones térmicas y de gran estabilidad atmosférica. La temperaturas máximas anuales en la isla oscilan entre los 18º y 25º, mientras que las temperaturas mínimas varían de los 12º a los 19º .
2 – Lugar tranquilo, pero con posibilidad de hacer diversas actividades. Fuerteventura dispone de 150 kilómetros de extraordinarias playas para tumbarse al sol, pasear y disfrutar a lo grande. Además, la isla es uno de los mejores destinos, a nivel mundial, para la práctica de deportes acuáticos. También cuenta con 255 kilómetros de senderos habilitados que se pueden recorrer tanto a pie como en bici.
Hay que sumar a esto el buen número de empresas que ofrecen un abanico de actividades que van desde el avistamiento de cetáceos, o paseos a caballo, a la observación de estrellas, paseos guiados, y talleres interactivos, que fomentan el aprendizaje ambiental.
3 – Aparte del buen clima, el turista invernal de larga estancia que llega a la isla, espera encontrar servicios e instalaciones públicas suficientes y en buen estado de conservación. En este aspecto Fuerteventura cuenta con una muy limitada red de servicios públicos que, a veces, están obsoletos y son deficitarios para llegar a toda la población.
4 – Conectividad aérea. Para los turistas energéticos es importante contar con vuelos directos y cómodos que conecten, en 3 o 4 horas, su destino con las principales ciudades de su país. En este aspecto Fuerteventura es una privilegiada. La isla dispone de una amplia conectividad aérea. Para este invierno hay programadas 342.000 plazas aéreas que conectarán Fuerteventura con toda Europa.
5 – Buena cobertura de internet. No olvidemos que para los turistas de larga estancia es importante, ya sea por trabajo o para estar informados de lo que sucede en sus lugares de residencia, contar con una buena y estable conexión a internet. Por ello en la mayoría de los alojamientos que ponemos a tu disposición en FuerteventurActiva hay conexión a internet de fibra óptica.
6 – Para concluir comentar que el turista de larga estancia se siente más atraído por los destinos con bares, restaurantes y supermercados que dispongan de productos que les sean conocidos. Fuerteventura cuenta con una amplia representación de locales, donde prima la gastronomía internacional hecha por y para el turista europeo.