La ruta senderista que os proponemos hoy transcurre entre dos históricas ermitas: La de San Agustín en Tefía y la de San Andrés en Tetir. Es una variación del sendero PR FV-15.
Fuerteventura te regala, en todo este recorrido, un paisaje agreste que parece haberse quedado anclado en otro tiempo, en aquella época en la que Fuerteventura olía a parva, trilla y cereal. Cuando los molinos y las molinas de la isla no dejaban de girar, gracias a los vientos alisios.
Antes de comenzar la ruta puntualizar que, este es uno de los caminos denominados históricos. Ha sido transitado por miles de majoreros a lo largo de la historia. Fue una de las sendas más directas y rápidas, que hubo antaño, para ir desde Tefía hasta Tetir.
Inicio de la Ruta: Ermita de San Agustín
El punto de partida, además de un buen lugar para dejar el vehículo, es la ermita de San Agustín, en Tefía.
Aquí te dejamos el link del Googlemaps.
El pequeño y modesto santuario de Tefía data de principios del siglo XVIII. Ha sufrido, a lo largo de los años, diversas remodelaciones. En un principio, la ermita estaba abierta al campo. Constaba de una sola nave con cubierta a dos aguas. Posteriormente se le añadió la barbacana (muro exterior) para evitar el paso del ganado, también la sacristía de dos alturas y una capilla cubierta por una falsa cúpula octogonal.
Tras un ligero vistazo a la ermita, nos adentramos por el camino de tierra dirección este, hacia las montañas, dejando a nuestras espaldas el templo de Tefía.
El primer kilómetro y medio de este sendero, discurre por las lindes de fincas agropecuarias, en cuyos muros podremos encontrar, si no vamos con prisas, petrograbados. Algunos de estos son tableros de juegos, entre ellos dameros de cedrés y chasconas.
Estos muros se hicieron hace tiempo y, para levantarlos, utilizaron todo lo que tenían cerca. Posiblemente muchos mampuestos procedan de algún hábitat aborigen cercano.
Pasado el primer kilómetro y medio, la senda se hace más estrecha y pendiente. Se nota que vamos subiendo hacia la Degollada de Facay.
Durante, aproximadamente, 2 kilómetros de ascensión podremos disfrutar de unas extraordinarias vistas de las faldas de la Montaña de Facay, el pueblo de Tefía, y de su entorno. Destaca, por encima de todo, Montaña Bermeja que se alza solitaria sobre la extensa llanura.
La vegetación que encontramos, durante esta parte del recorrido, está compuesta, fundamentalmente, por verodes, tabaibas salvajes y aulagas. A su vez, el paraje es el hábitat perfecto para las rapaces más emblemáticas de Fuerteventura, como el guirre, el cernícalo vulgar y el ratonero común. También suele verse, al atardecer, el murciélago de borde claro.
Ya solo quedan unos metros para llegar a la degollada de Facay.
La degollada es un enclave ideal para contemplar las dos vertientes de esta cadena montañosa que corre paralela a la costa majorera. Hacia el este se domina toda la Vega de Tetir, cuajada de gavias, nateros y cultivos. Mientras que por el oeste predominan los terrenos más áridos.
Aquí haremos ese merecido descanso, retomaremos fuerzas y repasaremos algunos datos históricos.
Esta zona fue muy significativa para el mundo aborigen. De hecho el nombre de Facay o Afacay hace alusión a algún personaje importante que vivió, en el lugar, antes de la conquista franco-normanda. El topónimo ha permanecido inalterable durante siglos.
También ha trascendido, hasta nuestros días, el nombre de una de sus hijas, “Iján”, denominándose así la fuente cercana de la que se abastecía la familia de Facay.
Una vez descansados, continuamos el camino hacia la vega de Tetir, considerada como una de las tierras más fértiles de Fuerteventura.
El sendero desciende suavemente, atravesando el valle. Discurre paralelo a las últimas estribaciones del sistema de cuchillos central. Las cimas más importantes que veremos a nuestra derecha son el Pico de La Fortaleza, Morro de La Galera, Morro de La Atalaya y Morro de Las Piteras.
En apenas 40 minutos, desde la degollada de Facay, estaremos a las faldas de la montaña de San Andrés, frente a la ermita homónima.
Fin de trayecto: Ermita de San Andrés
La ermita de San Andrés ha sido reconstruida hace tan solo unas décadas. Esta moderna construcción no nos puede hacer olvidar que, aquí, estuvo el primer santuario de la Vega de Tetir, erigido en 1652.
Cada 30 de noviembre se dan cita miles de romeros en la ermita. Acompañan al santo en procesión por las calles de Tetir hasta la plaza de Juan Rodríguez y González.
¿Qué distancia y cuánto se tarda en hacer la ruta de San Agustín hasta San Andrés?
A pesar de que el recorrido es de poco menos de 8 kilómetros, se invierten, en completarlo, algo más de 2 horas. Calcula ida y vuelta 5 horas.
¿Qué dificultad tiene?
La ruta no cuenta con dificultades técnicas o de orientación. Sin embargo, la subida hasta la Degollada de Facay es bastante pronunciada. Esto hace que el recorrido no sea apto para todas las condiciones físicas. Diríamos que tiene una dificultad media.
¿Hay opciones de volver al punto de salida en transporte público?
Si has decidido hacer esta ruta acercándote en un solo vehículo particular hasta la ermita de Tefía, y no puedes volver caminando, tendrás que hacer dos trayectos en guagua (bus). Primero desde Tetir a Puerto del Rosario, en la línea 07. Y después, coger la línea 02 (Puerto del Rosario-Vegas del Río Palmas) que te dejará en Tefía, a unos 500 metros de la ermita de San Agustín.
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